martes, 3 de marzo de 2020

Mi querida lola operada


Carta de los papis de Lola después de su operación del ojo-
Querida Loli, 
Hoy  18 de febrero del 2020 empieza una nueva vida para ti, espero que entiendas que todo este camino ha sido para salvar tu ojito, aunque no lo hayamos conseguido.
Llegaste a nuestras vidas llena de miedo y dolor, inaccesible e incluso invisible. Caíste en una jaula del CES, y eras demasiado pequeña para esterilizar. 
Te quedaste en casa de Ana, la persona a la que le debes estar viva, aunque tú no lo sepas, y cuando tuviste la edad se te esterilizó. En ese transcurso de tiempo tu ojito que pensábamos que estaba mal por algún golpe que te diste en la jaula, seguía empeorando.  
Te pasabas el día escondida y no te dejabas coger para poder tratarte. Sólo salías de tu escondite cuando no había nadie por la noche. ¿Cómo se te iba a tratar? Todas estábamos muy preocupadas, especialmente Ana. ¿Qué podíamos hacer? 
Al final decidimos traerte a casa y aislarte del resto del mundo. Fueron días y días de estar tu y yo solas casi 24 horas y querida Lola un día sin saber por qué decidiste quererme. A partir de ese día empezaron tus idas y venidas al veterinario. 
Te diagnosticaron una uveítis en tu ojo izquierdo. Ya han pasado más de tres años desde entonces. Muchos tratamientos y dos operaciones, y no conseguíamos que tu ojo mejorara. 
Nos preocupaba que aparte de tu salud, sería difícil encontrar a alguien que se interesara por ti para llevarte con ella. 
Pero sabes Loli, muy en el fondo de mi yo deseaba que nadie te quisiera porque me habías robado el corazón desde el día que diste un paso al frente y me miraste a los ojos y me llamaste para que te acariciara. 
Hoy te hemos llevado a operar, te han quitado el ojito, ese ojito que tanto daño te hacía y que te trajo a mí. Hoy querida Loli empieza tu nueva vida, sin dolor y sin más visitas al veterinario. Hoy mi niña ya eres nuestra para siempre porque te hemos adoptado.
Hay mucha gente que dice que tienes suerte de haberte quedado en casa conmigo, y yo lo que pienso que la suerte la tengo yo de tenerte a mi lado y de haber vivido momentos inolvidables e inexplicables, que solo los que los han sentido lo pueden entender, un vínculo invisible a los ojos pero que se siente en el corazón. 
Espero poder compensarte todo el dolor que has pasado y que tengas una vida feliz con nosotros.
Querida Loli, bienvenida a tu nueva vida sin dolor, bienvenida a casa para siempre.